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La carta que María dejó escrita


Esta es la carta que María, Mei para los amigos, dejó escrita con sus deseos para el 2017. 




"Querido 2017:
Sé que aún no nos conocemos y puede que pidiendo no sea la mejor manera de empezar, pero te juro que este año no son regalos lo que quiero. Este año no hay regalos, y no porque no tenga deseos, sino por todo lo contrario.

Este año deseo que mis padres sean más libres, deseo que disfruten, que sólo piensen en ellos. ¡Que sean egoístas! y tu me dirás... ¡Uy... eso es muy complicado, cuando te conviertes en padre, tus deseos pasan a un segundo plano! pero yo pienso que ya va siendo hora de que se quiten esa mochila llena de responsabilidades y preocupaciones y que disfruten sin remordimiento, sin pensar en el qué pasará, sin tratar de dilucidar el futuro o arreglar el mundo.

Este año deseo poder seguir contándoles todos mis secretos, seguir echando de menos los cafés con mi madre que son capaces de curar cualquier pena y resolver cualquier problema.
Querido 2017, deseo poder seguir sentándome en el colo de mi padre después de cada comida y bailar con él sin ningún motivo. Deseo seguir buscando su sabio consejo, el que siempre me ha ayudado tanto. ¿Sabes qué?.. Los años pasarán pero yo seguiré necesitándolos aquí, allí, lejos o cerca, eso nunca ha importado, ni nunca lo hará.
Que la vida está llena de idas y venidas, subidas y bajadas, pero he aprendido de otros años, que cuanto más difícil es el camino, más aprecias a quién te enseñó a pisar fuerte, cuanto más pedregoso el paseo, más afortunado te sientes de poder recorrerlo sin miedo a tropezar.
Y sí, eso sólo ha sido posible gracias a que ellos me enseñaron a vivir con mayúsculas, sin miedo a saltar, con los brazos abiertos y la mirada limpia.

Todo y todos tiene "su momento" y ahora, sin duda, es el suyo, así que querido 2017, déjate llevar, se fácil de caminar pero a la vez interesante y lleno de nuevas experiencias, y déjales disfrutar, que bien se lo merecen.
Con cariño, María "


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